Hemos ido a la luna,
hemos construido pirámides,
nunca hemos perdido la curiosidad
y hemos buceado a través de los mares.
Hemos vertido lágrimas,
hemos reído y
llorado, hemos hecho las paces
y nos hemos vuelto a unir.
¡Pero todas estas cosas son tan
pequeñas!
Porque lo más grande que nosotros
podemos (hacer) es ser personas.
Y andamos el camino, desde aquí,
hombro a hombro, durante toda una vida,
para siempre.
Porque andamos el camino, desde aquí,
más y más lejos, durante toda una vida,
para siempre.
Hemos descubierto mundos
que antes no conocíamos,
hemos aprendido a hablar
y nos hemos declarado nuestro amor,
hemos escrito canciones,
hemos bailado y cantado,
hemos llamado a espíritus
y dominado a demonios.
No siempre es fácil perdonar,
pero lo más grande que nosotros
podemos (hacer) es ser personas.
Y andamos el camino, desde aquí,
hombro a hombro, durante toda una vida,
para siempre.
Porque andamos el camino, desde aquí,
más y más lejos, durante toda una vida,
para siempre.
Sin duda no somos perfectos,
pero ¿quién quiere serlo?
Todos tenemos pequeños fallos
y en ello no estamos solos,
no estamos solos, no estamos solos.
Y andamos el camino, desde aquí,
hombro a hombro, durante toda una vida,
para siempre.
Y andamos el camino, desde aquí,
hombro a hombro, durante toda una vida,
para siempre.
Porque andamos el camino, desde aquí,
más y más lejos, durante toda una vida,
para siempre.
© Pablo Mendoza Casp, 2020